por Barbara

Suelo recomendar a las personas que escriban cuando están angustiadas. A los gatos también se lo recomendaría, pero los siento tan sabios que estoy casi segura de que nunca se angustian, como si su vulnerabilidad tuviera una dimensión que este mundo no podría jamás alcanzar. Sin embargo, escribir es lo último que puedo hacer cuando estoy triste. Es que no tolero ser vulnerable, y mucho menos que lo sepan. Esta vez, y desesperada, creo que quizás escribiendo sea una manera de sacármela de encima. O al menos de hacer de eso algo productivo. Aunque, ¿qué puede tener de productivo esto que escribo?, no creo que le resulte estimulante a nadie, y por lo general es lo que me gusta transmitir: ganas, voluntad, energía, y hasta convicción de que se puede cambiar el mundo. Sí, además de vulnerable también ahora me siento ilusa. Igual estoy segura de que en algún lugar, en alguno, por más remoto que sea, hay un gato verde, tocando canciones que no entiendo, pero porque no se pueden entender con la cabeza, y estoy segura de que cuando lo escuche, ahora mismo, en mis sueños, todo esto se me va a pasar.
Que duerman.
3 comentarios:
niveyro trolaa! no entiendo esta cosa espero que salga el mensaje. sos hermosa y se extraña tu cara simpatica (?). q se te pase pronto la tristeza q sos del as pocas personas q saben como contagiar ganas. te quiero y se que vos tambien aunque nunca lo digas!
tenes razon
es hermoso lo que escribis
Es cierto que a veces escribimos y no sabemos bien por qué. Pero del otro lado siempre hay alguien que quiere entender y justificar tus ganas de cambiar el mundo, sino, para qué estamos aquí.
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